Prevaricato Moral.

En la jerga jurídica, el prevaricato es utilizado en ocasiones para definir una ilegalidad basada en la representación de intereses contrapuestos, por lo cual por ejemplo, un abogado no puede ser defensor de dos partes enfrentadas. No… no se confundieron, no cambiamos de rubro, este sigue un espacio deportivo, pero esta definición que alguna vez leí, empezó a rondar mi mente ante la noticia de que Aníbal Fernández asumió como Vice de Quilmes A.C.

Varios medios informaron que ya hay una causa en las manos del Juez Federal Norberto Oyarbide, por presunta violación a la ley de ética pública por parte del actual jefe de gabinete, ya que estando en la administración de un club, seguirá recibiendo el dinero para la televisaciòn del fútbol, no olvidemos que Aníbal es el hombre fuerte “K” en lo que respecta al “fútbol para todos”.

La legalidad o ilegalidad de estar al frente de ambas responsabilidades quedará en manos de la justicia, pero mas haya de esto, cabe preguntarse a uno mismo apelando a nuestro sentido de la moral y ética: ¿Es correcto que dirija los destinos de un club, cuando a su vez seguirá siendo parte del negocio que sustenta al fútbol Argentino,y que a cada fin de temporada hace que los equipos se saquen los ojos para ver quienes de ellos se llevan la tajada más importante? Es correcto que sea directivo de un club, cuando todos sabemos la cercanía entre el gobierno y la AFA para definir múltiples aspectos del fútbol Argentino? Si la respuesta que tuvieron tras plantearse estos interrogantes es un rotundo NO, estarán de acuerdo que este tipo de hechos no ayudan al fútbol Argentino, y favorecen a aumentar el manto de sospechas ante cualquier situación que se de en el futuro. Un mancha más que le quita seriedad a nuestro fútbol, Todo pasa…

BURNER.