Son esos hechos que a uno lo indignan no como hincha del fútbol sino como habitante del suelo argentino. Lógicamente me estoy refiriendo a lo sucedido en la cancha de Independiente, durante el encuentro entre el local y Boca Juniors.
Todo comenzó antes del inicio del partido, cuando tras la salida de ambos clubes, los “simpatizantes” del rojo de Avellaneda tiraron al verde césped bolas de fraile y paraguitas de chocolate como sinónimos de que los hinchas de Boca son de Bolivia y Paraguay.
Pero ¿esto es el folklore del fútbol? Definitivamente no, porque esto fue un acto discriminatorio hacia las comunidades bolivianas y paraguayas. Además uno se pone a pensar y termina diciendo:”hay chicos que en el país se mueren de hambre y estos inadaptados tiran comida”. La voz del estadio harto de esta situación les reclamo por el bien de Independiente, que si querían la suspensión del estadio directamente no tenían porque ir a ver el partido. Recordemos lo sucedido la semana pasada cuando en el choque de vuelta por los octavos de final de la Copa Sudamericana, hubo una cobarde agresión al arquero Silva de Defensor Sporting. Por lo tanto el estadio del rojo corre serio riesgo de ser suspendido y eso podría complicar al conjunto de Mohamed de cara a las instancias decisivas del torneo continental.
El titular del INADI (Instituto Nacional contra la Discriminación) Claudio Morgado sostuvo que: “Independiente debería ser sancionado” por los hechos de la víspera, y además “porque es reincidente”.
No solamente la crítica es para la tribuna local. También la hinchada xeneize al finalizar el partido y en señal de represalia, utilizo aerosoles y pintó con los colores azul y amarillo la tribuna del Libertadores de America.
Ahora surge otro interrogante ¿Cómo entraron esos elementos?, la única certeza es que los controles lo realizan gente de la barra brava del equipo de Avellaneda, entonces la obviedad aparece velozmente y aterra al hincha inocente.
La bochornosa tarde culminó con la represión de la bonaerense hacia los simpatizantes de boca que salían del estadio. El rumor que circuló es la vinculación del jefe de la barra de Independiente con la Policía Bonaerense y por ese motivo paso el ataque en las afueras de la cancha.
El partido fue una horroroso 0 a 0, los dos equipos jugaron muy mal y van a tener que mejorar mucho de cara al futuro. Eso es una anécdota, el terror y la vergüenza ya estaban escritos de antemano.
BRANCA
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